Somos una familia global que trasciende fronteras y culturas

Esa es nuestra esencia: una mirada internacional e intercultural
Creemos que al descubrir la riqueza de nuestra diversidad, podemos construir una visión del mundo mucho más amplia y llena de esperanza que cualquier perspectiva nacional o cultural. Esto nos impulsa a colaborar y a trabajar en red, no solo entre nosotras, sino con todas las personas que comparten nuestro sueño de un mundo mejor, más justo.
Hoy, somos una vibrante congregación católica
Con alrededor de 400 hermanas provenientes de 22 países y de un sinfín de culturas, presentes en 19 naciones de cuatro continentes.


Desde África (Ghana, Uganda, Kenia, Etiopía, Malawi)
hasta Asia (India, Pakistán, Indonesia, Filipinas), pasando por Europa (Inglaterra, Holanda, Alemania, Bélgica, Italia), América del Norte (Estados Unidos) y América del Sur (Venezuela y Perú), nuestras diversos dones y profesiones se unen para llevar la misión a cada rincón. Con los aproximadamente 100 asociados en diversos países, la presencia sanadora de Dios se hace palpable aún para mucha gente más.

Esta diversidad es una fortaleza que nos permite abordar los desafíos del mundo…
desde múltiples perspectivas, aprendiendo unas de otras y enriqueciendo nuestra misión día a día.

Si sientes el llamado a ser parte de esta unión global
y buscas construir un futuro más justo y saludable, te invitamos a conocer cómo nuestras voces y acciones se entrelazan para generar un impacto transformador.